¿Cómo absorbemos la información que nos rodea?, ¿lo hacemos todos de la misma forma o por los mismos canales?
Parece lógico pensar que la forma de relacionar lo que nos pasa alrededor es a través de nuestros sentidos. Pues es verdad, lo que nos dice el modelo de programación neurolingüística (PNL) es que hay tres formas de percibir la realidad: de forma visual, oral o kinestésica.
Es muy importante conocer y dominar esto, ya que imaginaros que tenéis que hacer una presentación en público o dar una formación y queréis que vuestros mensajes sean igualmente entendidos por todos, y lo que es más importante que todos mantengan la atención durante tu presentación que no se dispersen, entonces vuestra presentación ha de tener un equilibrio claro entre estas tres formas de percepción, si no discriminaremos a cierto tipo de oyentes a los que les costará más mantener la atención y antes o después los perderemos.
Claro está que no utilizamos un único canal, sino que en cierta medida utilizamos los tres. Lo que pasa es que, al igual que con todo, nos sentimos más cómodos con uno de ellos y por eso lo desarrollamos más.
Según Cazau, en su libro: “Estilos de aprendizaje: El modelo de la programación neurolingüística”, un 40% de las personas es visual, un 30% auditiva y un 30% kinestésica.
Informándome por la red sobre las PNL, di con varios ejemplos que explican de forma muy clara cómo las personas reaccionamos, ante la misma situación, de forma muy distinta en función de nuestro canal de comunicación con el exterior:
“... al saludarse, las personas que tienden al canal auditivo prefieren hablar: “Hola!”, quienes tienden al canal visual quizás prefieran sonreír o saludar con la mano, mientras que los kinestésicos preferirán un abrazo o darte la mano”
“…al recordar a una persona, los que tienden al canal auditivo lo harán por medio del nombre, los que tienden al canal visual los harán por su cara, mientras que los kinestésicos tratarán de recordarla por medio de las sensaciones que tuvieron en ese momento”
Por lo tanto si en una presentación abusáramos de las imágenes y utilizáramos pocas palabras perdiendo a los auditivos, si por el contrario utilizáramos un soporte muy pobre comunicándonos sólo con palabras estaríamos perdiendo a los visuales, además si estamos muy sosos y no transmitimos nada con el lenguaje no verbal estaríamos perdiendo a los kinestésicos.
Por lo tanto a modo de conclusión, debemos enfocar nuestra comunicación como si de una campaña de publicidad se tratara, sabiendo que existen varios canales de comunicación y que si pretendemos llegar a todos nuestros clientes objetivo debemos explotarlos todos al máximo.
“El pesimista se queja del viento.
El optimista espera que cambie.
El líder arregla las velas”.
John Maxwell
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